Plaza Alcalde José Ramón Parrado Cano

La plaza Alcalde José Ramón Parrado Cano es el centro neurálgico de Casariche, donde confluye la vida social y civil de sus ciudadanos. Su ubicación es el punto de partida de las calles más concurridas de la localidad: al norte, la calle Ntra. Sra. de la Encarnación, que conecta la parroquia homónima con la plaza; al sur, la calle Raúl Berral, la cual que se prolonga hasta la avenida de la Libertad, constituyendo ambas el principal enclave hostelero y comercial de Casariche; al oeste, una de las vías más cargadas de historia, la calle Luna; y al este, la calle Andalucía, donde se ve prolongada la peatonalización de esta plaza.

El levantamiento del actual edificio consistorial se remonta a principios del siglo XIX, dándose por concluido en 1928; hasta entonces, aquel emplazamiento había sido ocupado por una antigua posada. En las últimas décadas, esta construcción ha sufrido múltiples intervenciones en búsqueda de conseguir un espacio más diáfano y funcional, aunque, eso sí, respetando siempre la imagen de su fachada principal, cuyo estilo es regionalista de corte andaluz.

En la actualidad, la plaza se desarrolla de forma rectangular, de forma que el edificio consistorial ocupa el extremo menor que está orientado al norte. Sobre ésta se distribuyen ocho bancos, aludiendo cada uno de ellos a las provincias que componen Andalucía, y algunos naranjos dispersos que notifican la llegada de la primavera con el perfume de azahar que desprenden. El centro de la plaza está ocupado por un mosaico que representa el escudo heráldico de Casariche. 

La plaza no solo es el lugar habitual de reunión para los pequeños y mayores, sino que también es uno de los principales focos de atracción durante las épocas festivas. En estas ocasiones, la plaza es engalanada en consonancia al motivo de festejo, mostrando su versatilidad en la gran cantidad de estampas que recoge coincidiendo con fechas como: Noche Vieja, Semana Santa, la Cruz de Mayo o la Feria de Santiago. Ataviada de forma extraordinaria o en el día a día, esta plaza es un referente a la hora de conocer el día a día y la idiosincrasia de los casaricheños.

Barrio de Triana

Desde sus inicios, el núcleo urbano de Casariche ha estado dividido en dos por una barrera física, el río Yeguas. Hoy, la zona que queda al este constituye el casco histórico de la localidad, teniendo en su haber edificios tan emblemáticos como la parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación o el edificio consistorial. Por su parte, al oeste se abre el callejero urbano que identifican los locales con el barrio de Triana, denominación que ha desarrollado un gran apego entre los vecinos que lo conforman. 

Los elementos urbanísticos más significativos de Triana son la plaza de Cuba, el túnel de Triana y el puente que se eleva sobre el río Yeguas. El primero de ellos, conocido popularmente como plaza de Triana, se ha erigido como uno de los espacios más dinámicos del municipio, lugar de confluencia y esparcimiento de las personas que habitan los hogares aledaños. Este espacio alberga, adosada a una de las viviendas, la centenaria fuente de Triana, compuesta por una pila, un frontal rematado por una cruz y un pequeño tejado sostenido por columnas de hierro; antaño, nutría de agua a todos los habitantes que se acercasen a ella, además de cumplir las funciones de abrevadero para los animales. 

La construcción del túnel y el puente de Triana marcarían el desarrollo moderno de Casariche, mejorando cuantiosamente las infraestructuras locales. De un lado, el puente supuso una garantía a la hora de transitar de una orilla a otra de la localidad, permitiendo un mayor flujo de peatones y tráfico rodado entre las dos zonas. Por último, la implantación de una estación de ferrocarril en Casariche, al igual que las vías que daban acceso a ésta, planteó la necesidad de edificar un puente que permitiese conectar el núcleo urbano con la periferia. Sin embargo, el deterioro por el paso del tiempo y el aumento de los vehículos de tracción mecánica contribuyó al levantamiento de otro túnel de mayores dimensiones. Éste se encuentra ubicado junto al antiguo, que quedó relegado a un uso peatonal, conformando ambos una estampa que conmemora el pasado, presente y futuro de Casariche.