El Cerro Bellido acoge uno de los yacimientos arqueológicos más importantes que posee nuestro municipio. En él se encuentra una antigua cantera cargada de historia.

Este parque alberga unas canteras de piedra, cuya explotación se ha producido a lo largo de diferentes épocas. Gracias a la labor arqueológica realizada en este yacimiento, se han identificado restos constructivos y cerámicos que permiten afirmar la existencia de actividad a partir del período Púnico (s. V a.C. – II a.C.), continuando hasta la Edad Antigua (s. II a.C. – IV d.C.).

Estas canteras, a las que los romanos denominaban “lapidicinae”, dotaban de material para la construcción de infraestructuras relacionadas con la producción de vino y aceite. Tras los últimos estudios realizados en la zona interior de las canteras, se ha constatado la gran cantidad de piezas cilíndricas que se extrajeron de las mismas.

El trabajo en estas tuvo que ser muy intenso e incluso cabe la posibilidad de que este enclave estuviera habitado por los mismos obreros o esclavos que las trabajaban, como se ha podido comprobar por los numerosos restos de cerámica y utensilios de hierro hallados en la zona.

Esta masa pétrea se formó hace unos 200 millones de años, cuando el territorio de la actual Andalucía formaba parte del fondo del Mar de Tetis, mar que dio origen al actual Mar Mediterráneo. Es por esto que podemos encontrar entre los restos de estas canteras abundantes materiales fósiles.

Probablemente, los primeros trabajos de cantería comenzaron en época romana (bajo imperio), con el objetivo de proporcionar contrapesos a las almazaras que se distribuían en la zona del valle del Genil y que estaban destinadas a abastecer de aceite o vino a gran parte del Imperio. 

Durante la Edad Moderna es detectada de nuevo la ocupación en estas canteras, como consecuencia de la repoblación del territorio a raíz de la conquista de Granada, lo que supondrá un nuevo auge de las almazaras y la producción oleícola en la zona.

La puesta en valor de este entorno natural y arqueológico pone de manifiesto el potencial cultural y patrimonial que el municipio de Casariche posee, destacando la importancia de yacimientos arqueológicos como el Cerro Bellido, donde naturaleza y patrimonio se dan la mano en un espacio de singular belleza, muestra de la ocupación de estas tierras desde muy antiguo y cuyo legado se mantiene vivo a través de los años.